El amor ha sido un tema recurrente dentro de mis reflexiones, y motivo de la mayoría de mis publicaciones. Esta vez no es diferente. El amor, una palabra he podido encontrarle tantos significados, tantas aseveraciones como momentos he vivido. Es como si cada día aprendiera a amar de una manera diferente o más bien comprendiera que el amor contempla tantas formas como personas hay en el mundo.
Hoy me atreví, después de mucho tiempo, a amar otra vez. A amar así tal cual, sin miedos, sin ataduras, sin resentimientos, completamente ajena a las consecuencias. El amor es así, me dije y aunque titubeé al principio al decirlo, no lo hice por que sintiera temor sino por que quería disfrutar de ese momento, quería darme el tiempo que todos mis sentidos estuvieran atentos a ello, me dejé llevar, fui libre otra vez.
Hace un año ya que trabajo con una persona que es un tanto difícil en su trato. Difiero con la forma que tiene para dirigir al equipo, y con cualquier persona en general con la que tiene que lidiar, y esto ha sido motivo de frecuentes quejas, y discusiones dentro de la empresa donde el es director de proyecto y, cabe mencionar que mi jefe. Mantenemos una relación muy particular en donde yo me expreso frente a lo que no me parece, y el, por su parte me escucha, de este modo hemos logrado convivir en lo laboral en un ambiente en el cual si bien me he mantenido desde hace un año, frecuentemente la hostilidad ha sido protagonista en reuniones de pauta y conversaciones periódicas.
Sin embargo, aquí estoy, quizá por masoquismo o por que veo algo mas allá en ciertas personas que llegan a mi vida. No es que esté enamorada de él o algo así que, cabe mencionar que sospecho que no le gustan las mujeres, pero de si en algo estoy segura, es que he llegado a encariñarme con él. Sucedió que sentí hostilidad en su trato y, como siempre, lo encaré apelando al buen ambiente laboral que la empresa a impuesto establecer. Al poco tiempo después me pregunta si aún lo quiero a lo que le contesto "el amor es así" y entre risas distendemos nuevamente la comunicación entre nosotros. El amor es así. Cuando uno realmente quiere a una persona, debiera quererla tal y cual es, con sus defectos y virtudes, con sus pataletas y sus buenos momentos. Querer sin conocer es sólo una ilusión de la cual después intentas explicar con la frase cliché de "el amor es ciego". Pues difiero de ello, el amor no es ciego, es mas, el verdadero amor contempla cada rasgo del ser que se dice querer, los distingue claramente, los acepta y decide compatibilizar con ello. El amor es una consecuencia del análisis de los datos con los que se cuenta y de su respectiva conclusión un "te quiero" y surge de una decisión espontánea y voluntaria por darle un espacio a esa persona, dentro de nuestros sentimientos. Por que tal vez no decidimos quien llega a nuestras vidas, pero si quien permanecerá dentro de ella.