Al principio me costó trabajo entenderlo, pero ahora estoy convencida de ello. Lamentablemente debemos experimentar situaciones alarmantes para poder darnos cuenta de nuestras capacidades y limitaciones. Y digo "lamentablemente" por que es en las experiencias más difíciles en donde más aprendemos. Y cuando aprendemos a resolver determinados conflictos se nos hace mas fácil sobrellevarlos en caso de que este patrón se repita.
Imaginemos que vamos por un camino de tierra firme, todos los días cruzamos por ese camino ya que debemos dirigirnos a nuestro trabajo. Si en una oportunidad en aquel camino tropezamos con una piedra o con algún hoyo, entonces al día siguiente vamos a tener la precaución de sortear este obstáculo y no dañarnos nuevamente por tropezar con el. El cerebro humano reconoce el estado de alerta como una señal y busca la información de cómo responder frente a cada situación dependiendo si este evento ya ha sido registrado con anterioridad. Si es la primera vez, no sabrá como, y cuando el resultado (tropezamos y nos dañemos) se desencadene, entonces almacenará esta información para saber como actuar cuando una situación similar, se presente en alguna otra oportunidad.
En un programa de la televisión en el que analizaban las "corazonadas" se veía a un capitán de bomberos comandando a una tropa de voluntarios en la extinción de un incendio en una fábrica que ya casi estaba por completo extinguida. El capitán, al que estaban entrevistando, comentaba cómo, de repente cuando al parecer estaba todo controlado sintió una "corazonada". Ordenó rápidamente a su equipo que saliera de aquella fábrica y se refugiara. Sus subalternos, desconcertados por esta repentina obedecieron algo desconcertados. Estaban desalojando el lugar cuando de repente del interior de la fábrica sale una explosión que deja nuevamente todo e lugar en llamas.
El bombero no tenía ninguna explicación lógica frente a este suceso ni menos de su repentina decisión, solamente lo sintió y actuó. Los científicos que analizaban la intuición en el ser humano explicaban que seguramente los sentidos de aquel capitán, diestro y con años de experiencia en la extinción de incendios, captaron un patrón que le anunciaban peligro, esta información, llevada directamente desde el cerebro a la amígdala, actúa sin intervención de la corteza (razón) enviando respuestas inmediatas de acción.
La intuición, definido como el conocimiento directo e inmediato sin intervención del razonamiento, se vale de la experiencia para existir. Es el mecanismo de alerta y defensa con que nuestro organismo cuenta para enfrentar situaciones. Mientras más experiencias enfrentemos, mayor será nuestra capacidad de respuesta, por tanto más preparados estaremos.
La intuición, por tanto representa un escudo notablemente eficaz para protegernos o mas bien para enfrentar situaciones difíciles en nuestra vida. debemos escuchar nuestro corazón y tomarle atención. Se salta el conducto regular para alertarnos del peligro o potenciales situaciones en las cuales podremos salir perjudicados. Se expresa a través de "señales" ocultándose del razonamiento de nuestra mente, que muchas veces nos juega malas pasadas atormentándonos e impidiéndonos dar vuelta la página.
Señales que son apenas perceptibles: quizá físicas, inexplicables, sin lógica alguna, pero increíblemente valederas. Nos habla a través de los sueños, con pistas que debemos descubrir, disfrazando la realidad, confundiendo personajes y distorsionando la lógica para que nuestra mente no pueda intervenir. Así actúa el corazón, ilógica e irracionalmente mostrando lo que queremos por sobre lo que necesitamos, acercándonos a aquello que nos hace feliz sin que se rija necesariamente con aquello que nos conviene moral o socialmente.
Por eso " mira en ti, escucha el silencio, tu corazón te soplara las palabras, mientra dentro de ti misma y entonces prueba si alcanzas donde te lleva tu alma...mira en ti escucha el silencio, tu corazón te curara las heridas , cada vez que dudes y que no sabes, prueba escucharle, tu corazón si que sabe". extracto de la canción escucha a tu corazón de Laura Pausini.